Título: Once Upon a Time (Calluvia’s Royalty #3)
Autor: Alessandra Hazard
Formato: Kindle Edition
Páginas: 283 (según mi edición)
Capítulos: 38 capítulos.
Príncipe de Hielo
Al príncipe Jamil de Calluvia no le gusta ese
apodo, pero tiene que admitir que no está mal. Él es responsable y correcto, y
probablemente sea exacto decir que no es bueno en las emociones. Después de
enviudar, la vida de Jamil ha girado en torno a sus deberes como Príncipe
Heredero y poco más.
Pero una noche esto cambia.
Una noche, Jamil se encuentra con un hombre en
los establos reales, un hombre que es lo opuesto a lo apropiado, un hombre con
ojos tan negros como el pecado.
Rohan di’Lehr es todo lo que Jamil debería
despreciar.
Es un criminal grosero y de baja expresión.
Es terrible para el autocontrol de Jamil.
Hace que Jamil se comporte como un hombre sin
sentido, no como el Príncipe Heredero.
Ellos no tienen nada en común. No tienen
futuro juntos.
Todavía no puede mantenerse alejado.
Una historia de atracción prohibida y amor que
desafía todas las probabilidades.
Cuando pasa una fiebre, es complicado volver a ella. Hace días, semanas,
que salió el –hasta ahora– último libro de la ya declarada serie de Calluvia’s
Royalty (reseña del primero aquí y
del segundo acá) y en la última
reseña dije que el libro de Jamil no me inspiraba tanta ansiedad como el de su
predecesor, cuya pareja principal eran Ksar y Seyn (que aún los amo CON MI
VIDA), es más, pensaba que no me encantaría y tendría la misma nota que el
primero… pero me EN-CAN-TÓ.
Nos ubicamos meses antes de los acontecimientos de los dos primeros
libros. El príncipe Jamil está lidiando
ahora con la pérdida de su esposo Mehmer, príncipe-consorte, que fue
asesinado en un ataque rebelde. Una noche de insomnio por el dolor, va a las
caballerizas bajo la excusa de tomar un poco de aire y allí, entrenando a una
salvaje adquisición animal, ve a un hombre que jamás vio antes. En el primer
encuentro entre ambos una conexión única
y poderosa los golpeó causando que se tocaran los íntimos puntos
telepáticos de ambos, desconcertándolos gravemente. Jamil huye. Y a los
próximos días descubre que el desconocido era un Tai’Lehriano, Rohan di’Lehr,
que tiene toda la completa y misteriosa presencia de ser un posible rebelde
infiltrado. Su enemigo. De ser así, ¿cómo
es posible que a causa de esa inesperada conexión, en vez de odiar y desconfiar
de Rohan, Jamil no puede mantenerse alejado, sentimiento que el mismo Rohan
comparte? ¿Qué es lo que oculta Rohan? Y cuando las cosas empeoren para ambos,
¿tendrán la fuerza para luchar, para
continuar juntos?
Si hay algo que me gusta de esta autora es que tiene una facilidad para atraparme en la lectura con tan pocas páginas.
Si me tardé es por otras situaciones –ejem, universidad– pero, oh-por-Dios, no
esperaba lo mucho que me iba a gustar el libro de Jamil. En la reseña del libro
anterior incluso dije que no estaba tan entusiasmada pero las expectativas
fueron superadas con creces.
Seré rápida y concisa, contrario a otras veces. Me ha encantado mucho el
libro. La relación que se ha
desarrollado entre Jamil y Rohan fue hermosa. En un primer encuentro se
sintieron atraídos por ser almas gemelas, y tuvieron que luchar por esa
atracción prohibida pues a Jimil como viudo se le prohíbe tener una nueva
pareja. Peor aún, ambos realizan múltiples fusiones telepáticas, algo prácticamente
ilegal en Calluvia, que pondría en riesgo no solo sus vidas sino también la
reputación del clan al que Jamil pertenece. Además, Jamil no sabe nada de
Rohan, su información es limitada y podría hasta ser uno de los rebeldes que
mataron a su esposo.
La forma en cómo va fluyendo la relación entre ambos, como se van
descubriendo más cosas respecto a los Altos mandos quienes son los que
impusieron los vínculos telepáticos, las situaciones con respecto a los
rebeldes, las intrigas y la guerra fue algo sumamente interesante de leer. Hubo
muchas sorpresas a lo largo del libro, en relación a la pareja, y en relación
al mundo que ha creado la autora.
Como siempre con la autora, disfruté mucho los momentos románticos. Creo
que nunca antes de la mano de Alessandra
me he enamorado de una confesión como la que tuvieron Rohan y Jamil, ni siquiera
en su otra serie. Ambos son tan encantadores de leer, ni llegan a la picardía
de Ksar y Seyn, pero sin lugar a dudas ocupan el segundo puesto de mis parejas
favoritas en esta serie.
Por otro lado, estoy ansiosa por leer la historia de Idhron y Eridan. Durante
este libro no pude evitar comparar su situación a la de Sesshomaru y Rin, de
Inuyasha, y más con la descripción tanto física como psicológica que nos
presentaron de Idhron, quien me recordó rotundamente a Sesshomaru –un viejo
crush de la infancia.
Solo para terminar, sé que no parezco fangirlear con este libro, ¡pero
sí lo estuve! Lamentablemente mi cerebro está tan chupado de estrés que ni
siquiera tengo la energía para demostrarlo, sin embargo no podía simplemente
pasar de la reseña, cuando casi todos –mejor dicho, TODOS los libros de
Alessandra tienen reseña en el blog. Espero mejorarlo pronto, pero por ahora,
¡vayan a leer ese libro!
1 Comments
Libropatas, no me pregunten por PDF porque no quiero atraer cazadores al blog. NO comparto libro por ningún medio.
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